TRUSENS Rallador Tradicional de Cocina de Acero Inoxidable Fino

TRUSENS Rallador Tradicional de Cocina de Acero Inoxidable Fino

Existe un tipo de rallador que a pesar de no ser muy usual si es muy útil, en especial si te encantan las recetas saludables el rallador de cocina aunque no cuenta con orificios es perfecto para su fin, rallador de alta calidad en acero inoxidable está orgánicamente diseñado para preparar tus alimentos

Este utensilio es uno de cocina más esenciales en la cocina española, se utiliza frecuentemente para el queso fresco qua acompañará bocadillos, tostadas y otros aperitivos. 

✔️ Ideal para tu cocina: Más allá de la variedad de diseños que existen para los distintos tipos de ralladores, acá recopilamos te ofrecemos al mejor opción, que aunque tienen el mismo fin rallar los alimentos, te ofrecen diferentes elecciones de cortes.

✔️Rallador grueso: Este rallador sólo corta en una dirección, sus cuchillas tienen orificios grandes por lo que así será el resultado de los ingredientes que rallemos, ideal para quesos blandos, también para frutas y hortalizas de distintas durezas, desde calabacines a zanahorias.

✔️Rallador fino: Ideal para rallar la piel de los cítricos sin llegar al albedo (la parte blanda) en la primera pasada), también es el rallador adecuado para alimentos de distintas durezas cuando queremos un rallado bien fino, casi polvo, desde un ajo hasta nuez moscada, pasando por jengibre, quesos duros, chocolate, guindilla. 

✔️Tradición de marca: Llevamos a cabo rigurosos controles de calidad que nos permiten obtener un producto con unos estándares de aroma y sabor únicos. Nuestras trufas son seleccionadas cuidadosamente y posteriormente, clasificadas atendiendo a las necesidades de nuestros clientes.

✔️¿Por qué Trusens? Somos una empresa familiar, con experiencia en el mundo de la truficultura, apasionados por el cultivo de carrascas truferas, la recolección de la trufa y su manipulación. Controlamos cuidadosamente todas las etapas del proceso de elaboración de nuestros productos, con el objetivo de que la trufa llegue al consumidor en el óptimo estado de maduración y conservación.